lred04.jpg (8208 bytes)

lred06.jpg (19327 bytes)

bred.gif (4883 bytes)

Toda la información para el mundo de la Odontología                                                       

Información para Odontólogos

Web Center

Home Page

Trabajos

 Notas

Productos

Congresos y Eventos

Laboratorios Dentales

Clasificados

Cursos


Info Technology

Como integrar nuestro consultorio

Marketing Profesional
Plan de Marketing para Profesionales

Libros

Todos los libros

Bolsa de Trabajo

Envíenos sus C.V.


Humor

Una pizca de Humor 


 

 

 

 

Trabajos  

La Implantología Hoy

Autor: Dr. Sebastian Ranalli. Odontólogo Mat. 25956
 

La implantología comenzó hace muchos años buscando solucionar los graves problemas de movilidad en las prótesis que son habituales en los desdentados sin reborde óseo. Los primeros casos documentados consistían en 2, 3, o 4 implantes y sobre estos una sobredentadura retenida por medio de broches o tornillos. 
 
Más tarde al ver el éxito obtenido nos fuimos aventurando en reponer pequeñas brechas desdentadas, con todas las dificultades y errores que fueron apareciendo por falta de experiencia y medios, pero el sueño que teníamos era poder rehabilitar un desdentado total (Foto 1) y que recupere la estética y la función con una prótesis fija. 

Foto 1

 Hoy lo vemos posible (Foto 2), pero debemos destacar que no se logra solo por intuición o experiencia, se necesitan todos los estudios correctos y una minuciosa planificación para obtener este resultado, porque si hacemos un razonamiento lógico nos damos cuenta que cuando realizamos una prótesis completa no solo partimos de exactas impresiones, relaciones intermaxilares y pruebas de enfilado de diagnóstico con dientes proporcionales a su biotipo, para que una vez colocado en la boca verifiquemos el soporte labial y si el formato de las piezas encuentra la conformidad antes de terminarla (Foto 3). 

Foto 2

Foto 3

 
Todos estos pasos se deben realizar para que el protesista tenga puntos de referencia y así logre la armonía esperada tanto por el profesional como por el paciente. Con más razón cuando la idea es realizar varios implantes para una prótesis fija es necesario determinar la exacta posición de cada una, para que luego las coronas correspondan a cada fijación y no nos encontremos con alguno en el lugar de una papila, hecho que hace que no respetemos la línea media o que estén muy separados y el ancho de la corona clínica sea totalmente desproporcionado.
 
Los pasos deben comenzar con una simple radiografía panorámica (Foto 4) y si no encontramos riesgos ocultos, seguimos con un enfilado adaptado para luego de probado duplicarlo en acrílico y insertarle cilindros de aluminio para que determine la posición de cada pieza dentaria y así lograr una guía pretomográfica que debe ser colocada en el momento de la toma de una tomografía digital. 

Foto 4

En esta veremos unas líneas blancas que corresponden al aluminio y determinan la forma perfectamente acotada del reborde óseo en cada posición elegida. Es ahí donde aprovechando de la exactitud y simpleza de los programas de planificación quirúrgica, determinamos la posición y la cantidad de implantes descartando los lugares donde sería un riesgo su colocación, pero no corriendo hacia uno y otro lado para no caer en posiciones viciadas que no respeten la proporción deseada del tamaño de las coronas. 
  
Sobre el mismo modelo y en base a la guía pre y a la tomografía, se confecciona una guía quirúrgica de puntos de incidencia (Foto 5) que van a transportar la posición exacta y necesaria para que cada implante emerja en el centro de la corona clínica pretendida. 

Foto 5

Se colocan los implantes con la angulación y el tamaño correspondiente a cada espesor y forma de reborde (Foto 6 y 7). 

Foto 6

Foto 7

Hemos usado la marca HIGT-TI (Foto 8)que hace mucho nos está dando excelentes resultados y mientras sea posible la llevamos con un mango largo y en forma manual para evitar los movimientos no axiales que genera la llave criquet.

Foto 8

Pasados meses de espera evaluamos con una radiografía panorámica (Foto 9) y realizamos la segunda cirugía probando con un torquímetro la oseointegración. 

Foto 9

Luego de 15 días de espera para que se cicatrice el epitelio (Foto 10) transferimos la posición tridimensional de los implantes a un modelo mediante los transfer unidos con acrílico de baja contracción y cubetas perforadas y adaptadas observando que cada tornillo largo de fijación supere el confinamiento de la cubeta y pueda luego ser retirado (Foto 11). 

Foto 10

Foto 11

Se arrastra con silicona (Fig. 12) y se envía para que el protesista realice el modelo de trabajo. Sobre estos modelos se confeccionan nuevos rodetes y se relacionan entre sí (Fig. 13) para luego adaptar sobre ellos el enfilado de diagnóstico que habíamos realizado. 

Foto 12

Foto 13

Es fundamental realizar una llave de silicona para que el protesista tenga la referencia del volumen y la posición de cada pieza dentaria en relación con el implante colocado y así pueda generar las coronas clínicas pretendidas. Verificamos la adaptación clínicamente (Foto 14) y con una radiografía panorámica (foto 15) y luego de terminado le realizamos una placa protectora (Foto 16) para que si hay interferencias no permita la fractura de la porcelana ni provoque fuerzas volcantes que pueden generar perdidas óseas alveolares.

Foto 14

Foto 15

 

Foto 16


 
CONCLUSIONES
 

Si bien somos consientes que lo mejor son las piezas naturales, la implantología nos permite restituir una forma parecida a la natural pero mientras se cumplan todos los pasos necesarios ya que el economizar tiempo y medios nos pueda llevar a generar daños irreparables morales y funcionales en ese paciente provocando un rechazo hacia una técnica que bien utilizada es el mayor logro que introduzco la implantología en este siglo.



  

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

  

 

 





  

  

bared01.jpg (11446 bytes)


  

Ir al tope| Página Principal